Hay quien recoge sus bartulos en la playa temprano para no llegar muy tarde a casa, otros no separan sus ojos de sus smartphones e incluso los hay que se mantienen tumbados boca abajo en la toalla todo el día… Todos ellos se pierden uno de los mayores espectáculos del mundo: la puesta de sol. Y si encima es en un playa gaditana, entonces es un crimen total no tener los ojos clavados en ella.
Puesta de sol en Zahara de los Atunes
En toda la Costa de Cádiz, desde San Roque hasta Tarifa, encontrarás playas en las que cielo se torna naranja, la línea del horizonte comienza a hinotizarte y las olas del mar ponen la banda sonora perfecta a este alarde de perfección cromática. Por eso, es imperdonable venir a Cádiz y perderte una de ellas.
Y si lo que buscas es la comodidad total, tienes la opción de contemplar cómo el sol desaparece poco a poco tras el mar desde la terraza de una casa en primera línea de playa de Zahara de los Atunes, Conil de la Frontera o Caños de Meca… ¿Te lo vas a perder?
Hay quien recoge sus bartulos en la playa temprano para no llegar muy tarde a casa, otros no separan sus ojos de sus smartphones e incluso los hay que se mantienen tumbados boca abajo en la toalla todo el día… Todos ellos se pierden uno de los mayores espectáculos del mundo: la puesta de sol. Y si encima es en un playa gaditana, entonces es un crimen total no tener los ojos clavados en ella.
Puesta de sol en Zahara de los Atunes
En toda la Costa de Cádiz, desde San Roque hasta Tarifa, encontrarás playas en las que cielo se torna naranja, la línea del horizonte comienza a hinotizarte y las olas del mar ponen la banda sonora perfecta a este alarde de perfección cromática. Por eso, es imperdonable venir a Cádiz y perderte una de ellas.
Y si lo que buscas es la comodidad total, tienes la opción de contemplar cómo el sol desaparece poco a poco tras el mar desde la terraza de una casa en primera línea de playa de Zahara de los Atunes, Conil de la Frontera o Caños de Meca… ¿Te lo vas a perder?
