Eso es, rumbo al sur, hasta que ya no puedas más…. Y llegarás a la ciudad costera más meridional de toda Europa: Tarifa. Cosmopolita, aventurera, salvaje, natural… así es esta bella localidad del sur de Cádiz en la que podrás pasar unos días de ensueño desde alguno de sus apartamentos, de esos que miran a la playa en el Paseo marítimo o los que se asoman a la historia en el centro entre sus estrechas y encaladas calles.
Apartamentos para alquilar en Tarifa hay muchos, sólo debes saber bien cuál va a ser tu plan: si lo tuyo es volar con las olas y estar todo el día en la playa igual lo más acertado sería buscar un apartamento barato cerca de la playa; si prefieres no sólo playa sino vivir el ambiente cosmopolita de este precioso pueblo marinero, quizás un apartamento en el casco antiguo del pueblo de Tarifa, cerca de castillos, tiendecitas, terrazas y restaurantes es lo que más te puede atraer, o si buscas tranquilidad, apartarte del bullicio, vivir la naturaleza y la historia juntas, tu destino es un apartamento en la playa de Bolonia, sin duda.
Para fines de semana, temporadas o todo el año, en Semana Santa, vacaciones de verano, para dos personas, económicos, con ofertas de última hora, con piscina, en primera línea de playa, de lujo, que admiten perros, con opiniones de viajeros… y un sinfín más de posibilidades son las que encontrarás en nuestra web para alquilar un apartamento en Tarifa. Así que, ya sabes, busca un ratito y ponte cómodo para abrir la puerta al auténtico paraíso.
No exageramos en absoluto, podemos afirmar que Tarifa es un paraíso, ¿dónde si no podrías encontrar el equilibro perfecto entre playas, naturaleza, aventura, historia y gastronomía?
Playas, con casi 20 kilómetros de costa de arena fina y blanca y con la enorme y exclusiva ventaja de bañarte entre dos mares: el Mar Mediterráneo y el Océano Atlántico. La Playa Chica, con apenas 70 m. de longitud, es una pequeña ensenada de aguas mediterráneas junto al puerto y el centro de Tarifa donde acuden los tarifeños, especialmente en los meses de verano. La otra playa urbana, esta vez atlántica, que comienza en el pueblo y se extiende hasta Valdevaqueros es la Playa de Los Lances en la que es habitual la práctica de deportes acuáticos (excepto julio y agosto, en la zona más cercana a la villa, que está prohibida la práctica). Pero la estampa que todos tenemos en la cabeza cuando se menciona Tarifa es un extensa playa salvaje de arena fina y blanca, con fuertes vientos de levante, salpicada de coloridas velas de windsurf y kitesurf: es la Playa de Valdevaqueros, que se extiende hasta la playa de Punta Paloma y la gran duna. En ésta última puedes embadurnarte de barro, pues hay numerosas zonas de fangos y se ha hecho muy popular dar un paseo hasta allí y hacer terapia natural. Pasada Punta Paloma, nos encontramos con la Playa de Bolonia, a 25 km de Tarifa, conocida también como El Santiscal. Una preciosa y extensa playa, también con zonas de calas, en la que igual te encuentras chiringuitos, ruinas romanas o vacas tomando el sol.
Naturaleza, por albergar en sus inmediaciones nada más y nada menos que 4 espacios naturales: el Parque Natural de los Alcornocales, el Parque Natural del Estrecho, el Paraje Natural Playa de los Lances y el Monumento Natural Duna de Bolonia, con sus impresionantes 20 metros de altura. En ellos, además de practicar toda clase de deportes de turismo activo, podrás avistar increíbles especies de aves y cetáceos en su paso por el Estrecho de Gibraltar. Hay numerosas empresas que te llevan en barco por las aguas del estrecho para divisar delfines y ballenas, una experiencia única.
Aventura, como no, por ser la cuna por excelencia del Windsurf y el Kitesurf. La Playa de Valdevaqueros, sobre todo, llena de chiringuitos y hoteles con encanto se convierte en un espectáculo de vivos colores y saltos imposibles. Seas aficionado o no, si estás por la zona te recomendamos que vayas a vivirlo.
Historia, porque Tarifa palpita historia viva a través de sus muros de piedra y cal, y de sus campos y montañas de alrededor, desde pinturas rupestres en cuevas cercanas, pasando por vestigios fenicios, ruinas deuda antigua urbe romana del siglo II a.C. com termas, templo, anfiteatro, fábrica de salazones y garuó (Baelo Claudia, en Bolonia) e incluso un castillo con torre octogonal que mira al mar: el Castillo de Guzmán el Bueno, del s. X al XV.
Y gastronomía, por supuesto. Ya los fenicios establecieron en sus aguas las primeras almadrabas, un arte de pesca tradicional, artesanal y sostenible, por el que se capturan cada año atunes rojos que vienen al Mediterráneo a desovar. Mmmmm, atún rojo salvaje de almadraba… un exquisito manjar que puedes degustar de forma tradicional en los muchos bares y restaurantes de “toda la vida” o de manera más original en los nuevos restaurantes que fusionan nuestros pescados con cocinas internacionales. Pasear por las calles históricas de Tarifa es un lujazo, vivir el ambiente intercultural, tapear por el pueblo, ver sus exclusivas tiendas o acercarte a los chiringuitos a pie de playa a tomarte una cervecita o un refrescante mojito mientras contemplas una maravillosa puesta de sol al son de una buena música… Como decíamos al principio… ¿es o no es el paraíso?
Acércate a Tarifa para tus vacaciones en verano o en Navidad para pasar las fiestas junto al mar, o en febrero en Carnavales, o por Semana Santa, o el 16 de julio para ver la procesión marinera de la Virgen del Carmen, o el primer domingo de septiembre que se celebra la Real Feria… o , simplemente, cualquier fin de semana que te apetezca bajar al Paraíso.